Un pequeño paraíso
¡Muy buenas! Llega septiembre y volvemos a las andadas. He estado ocupada en muchas cosas pero eso no implica que me haya olvidado de ustedes. Los llevo siempre en mi corazón. Vuelvo al reto de los 52, que tampoco está olvidado.
#15 - Describe un paisaje de tu ciudad
que cruces a diario.
Céntrate en los sonidos, olores
y colores que ves.
Un pequeño paraíso
«Quizá no sea el paisaje perfecto, es un recorrido habitual por las mañanas o las tardes para ir al centro comercial. Me gusta recorrerlo por la tarde cuando está atardeciendo. Por lo general hay pocas personas o coches recorriendo la zona, por lo que no hay tráfico y solo se oyen mis pasos que resuenan en las casas. Hay un bloque de edificios, solo uno. El resto son casas bajas con grandes jardines y terrenos.
En un día soleado, todo está perfumado por la tierra caliente, hasta la hierba parece hervir y las flores rezuman su perfume como un caldo caliente. El zumbido de las abejas lo llena todo junto al piar de las aves que revolotean entre las ramas. En ocasiones se escucha un cortacésped perdido y oculto que trae el aroma de la hierba recién podada como una brisa fresca. Sin embargo, si es un día brumoso, en el aire cuelgan los olores como si estuviesen suspendidos de pequeños ganchos. Por desgracia no todos son igual de agradables. Se perciben como pegajosos, colgados olores y hedores en una bruma que hay que apartar al andar y que, en ocasiones, se refresca con un poco de viento.
La maravilla son los colores. El único tono neutro es el bloque de edificios gris pero luego, cada paso que doy está bañado colores de los edificios, las casas en tonos tierras acogedores, la aquaescuela con azules, verdes y rojos, divertida para los niños. Los campos con sus verdes, las flores en una explosión llamativa. Aunque quizá lo más maravilloso de todo se encuentra en su atardecer, ese momento preferido que estoy describiendo cuando el cielo abandona el celeste para teñirse de dorado, en su fusión hacia los naranjas, rojos, rosas e incluso rojos del horizonte. Los perfumes antes descritos se intensifican con la brisa que acompaña el ocaso y se dulcifica de mano de un ciruelo que cruzo todos los días, esperando que deje caer sus frutos.
Este es un pequeño paraíso, una joya perfumada de mil colores.»
Espero que les haya gustado, volveré a la rutina con más y mejor.
Siempre serán bien agradecidos comentarios, ¡Saludos!
Hola Magali! Como estas? Me gustó mucho tu relato, sobretodo cuando expresas lo que sentis por los colores en el paisaje, son increibles y concuerdo que lo mas lindo es recorrer alguna parte de la ciudad cuando no hay mucho tráfico y personas ansiosas. En fin, me gusta mucho como escribis! Voy a seguir leyendo tus entradas, cuando quieras podes pasarte por mi blog. ¡Nos leemos! Besos :)
ResponderEliminar¡Hola Bel! Muchas gracias por pasarte =D
EliminarMe alegro de que te haya gustado. Siempre busco explotar las emociones. Muchas veces para poder evadirnos y descansar un poco de tanto quilombo que hay en el día a día no hace falta irse de vacaciones, solo con dar una vuelta por uno de esos pequeños paraísos durante cinco o diez minutos ya se despeja la mente y volvemos a estar relajados.
¡Ya nos iremos leyendo! Te aseguro que en breves estaré por tu blog. Un beso enorme ;)
¡Graciaaas! Que ilusión me hace estar nominada *.* jajaja Me iré poniendo a ello para subirlo tan pronto como pueda.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
¡Hola!
ResponderEliminarMe encanata como has descrito, especialmente, los olores y el atardecer. Fueron las partes que más me gustaron, aunque todo el relato estaba muy bien. Me gusta como escribes.
Un abrazo :).
¡Hola Rush!
EliminarMe alegro mucho de que te haya gustado =D
¡Gracias por el comentario! Creo que la descripción de los olores es una de las más complicadas, así que es alegría doble que te gustase ^^
Un beso ;)